La cosa parecía sencilla para el Barça tras el final del primer tiempo. Primero Pedro, tras una gran jugada de Lionel Messi, ponía el 1-0. Dos minutos más tarde, Dani Alves sacó un tremendo derechazo desde afuera del área y la clavó en un ángulo. Era el 2-0. Parecía historia liquidada.
Sin embargo, en el segundo tiempo el Madrid mostró su cara más combativa y a punto estuvo de eliminar al Barcelona. En el minuto 68, Cristiano Ronaldo definió notablemente, dejando por el camino al arquero Pinto tras un gran pase de Mesut Özil. Tres minutos más tarde, el francés Karim Benzema se metió dentro del área y, tras un sombrero, definió muy bien. El 2-2 ponía un manto de incertidumbre sobre el Camp Nou: con un gol más, el que pasaba a semis era el Real.
Sin embargo, los de Mourinho no pudieron conseguir el gol del triunfo. Sobre el final, en el minuto 88, Sergio Ramos disputó una pelota con Sergio Busquets. El árbitro interpretó que Ramos tiró un codazo y lo expulsó.
Después, el final y una imagen repetida. El Barcelona festejando y el Real Madrid con la cabeza gacha. Como viene siendo costumbre en los últimos tiempos.
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