El gerente deportivo aurinegro Osvaldo Giménez concretó, en la madrugada de ayer, la contratación del delantero Rodrigo Mora, y ahora está abocado a una empresa aún más difícil: el retorno de Cristian Rodríguez.
Giménez, que se encuentra en Lisboa (Portugal), mantuvo una extensa reunión con los directivos del Benfica, donde logró que estos avalaran la cesión de Mora por seis meses, con lo que el delantero defenderá a Peñarol en la Copa Libertadores y el torneo Clausura del fútbol uruguayo.
Contento con el éxito de la gestión, el gerente mirasol redobló la apuesta y se contactó con los directivos del Porto para determinar la viabilidad de que esta institución ceda al "Cebolla" Rodríguez. Si bien dicha negociación es calificada como "difícil" en la interna mirasol, aún no le pusieron el mote de "imposible".
EL CASO MORA
Hubo final feliz en Lisboa y satisfacción en Montevideo. Eso fue cerca de las 3 de la mañana de ayer en tierras portuguesas, donde Giménez tuvo que lidiar contra dos propuestas más atractivas desde lo económico: una del Deportivo La Coruña, quien estaba dispuesto a pagar la cesión de Mora, y otra de Qatar, desde donde llegó una oferta de 500.000 dólares por el pase del futbolista uruguayo. El gerente deportivo de Peñarol, con la ventaja que le otorgó el hecho de estar cara a cara con las autoridades del Benfica, les hizo ver que lo mejor no era vender al futbolista ni cederlo a un equipo de Segunda División de España (como la Coruña), si no cederlo a Peñarol, donde tendría continuidad asegurada y podría mostrarse en la Libertadores. Esto, sumado a la posibilidad de estar más cerca de la selección nacional, harían que Mora se revalorizara y retornara en seis meses al Benfica con otra perspectiva.
Pesó también la decisión del propio jugador, quien enfatizó que su deseo era jugar en Peñarol. Mora mantenía contactos continuos con el técnico mirasol Gregorio Pérez, y eso lo tranquilizó, porque el DT le manifestó que continuaba esperándolo, más allá del tiempo que había transcurrido desde que solicitó su contratación.
LA INACTIVIDAD
Un dato a favor de Mora es que viene entrenándose junto al plantel principal del Benfica, por lo que físicamente está apto para ser exigido apenas pise Montevideo. Un dato en contra es que sólo jugó un partido oficial en el último año, dado que en 2011 no tuvo actividad: en el primer semestre fue separado del plantel de Defensor y en el segundo no fue tenido en cuenta por el Benfica, quien acababa de contratarlo.
Ahora Mora se vestirá de amarillo y negro, para intentar reflotar aquella imagen que dejó en el Apertura 2010 -el último torneo donde tuvo continuidad-, donde se cansó de hacer goles para que Defensor diera la vuelta olímpica.
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